Existen diferentes tipos de benchmarking: competitivo, interno , funcional y de genérico. El objetivo común de los cuatro tipos es ayudar a los managers a que miren hacia fuera de sus departamentos, de sus organizaciones, hacia su competencia o hacia otros sectores en las que hay compañías que son las mejores en su clase.
En este blog te mostramos cuales son los cuatro tipos de benchmarking que podrás aplicar a tu estrategia.
- Benchmarking interno
En el tipo interno del Benchmarking harás la comparación entre los diferentes departamentos o áreas que conforman tu organización. En otras palabras, identificará puntos en común entre ambos equipos y después enumerará los puntos fuertes y débiles de cada uno para encontrar las áreas de oportunidad y los procesos que pueden mejorarse.
Un ejemplo de este podría ser, si actualmente te encuentras preocupado por los resultados que se han estado obteniendo en tu área de marketing, pero con las ventas te sientes satisfecho, entonces lo mejor sería pensar qué es lo que tienen las ventas que no tiene la publicidad. Si bien cada departamento tiene procesos diferentes, pueden unirse de alguna manera para mejorar y maximizar sus resultados.
- Benchmarking competitivo
Este método es para tener el conocimiento de la posición que tiene una empresa en comparación con sus competidores. Es ideal para determinar y profundizar procesos, estrategias y técnicas para lograr objetivos comerciales.
Su beneficio consiste en comparar el desempeño actual de tu empresa con el de tu competencia para detectar a tiempo posibles fallas y ajustarlas a los resultados que buscan lograr.
Esta clase de benchmarking es bastante útil si tu empresa busca posicionar algún producto o servicio en el mercado. Las formas de recopilar información pueden ser las siguientes:
Directo: antiguos empleados, proveedores y clientes (suele ser una investigación más limitada).
Indirecto: vías indirectas como Internet, publicaciones, catálogos, estudios de productos, entre otros.
Cooperativo: intercambio de información entre las empresas competidoras.
- Benchmarking funcional
A diferencia del benchmarking competitivo, en el funcional no solo es necesario observar cómo lo hace tu competencia, sino ampliar tu margen de búsqueda. Esto incluye a tus competidores indirectos y a otras organizaciones que no disputan ningún lugar contigo en el mercado. Lograrlo requiere encontrar a aquellas empresas que dentro de tu sector están haciendo las cosas bien.
- Benchmarking genérico
En concepto puede ser parecido al benchmarking funcional, ya que se concentra en el análisis de procesos operacionales. La diferencia es que se enfoca en comparar los logros de tu organización con lo mejor que exista en la industria o sector, ya sea en funciones o procesos afines.
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